Nos colamos en el rodaje de ‘Amigos hasta la muerte’, la primera película escrita y dirigida por su marido, Javier Veiga, una historia recién estrenada sobre cómo afrontar el cáncer con humor y ternura. Y descubrimos sus secretos ‘beauty’.
Con Marta Hazas, todo es fácil. Quizá por eso Javier Veiga recurre a su mujer una y otra vez (‘5 y Acción’, ‘Pequeñas coincidencias’, la primera serie original española de Prime Video) para dar vida a las historias que se le ocurren sobre el papel. Y esta era la más especial de todas, basada en una experiencia familiar personal, que Javier ha extrapolado a la relación de tres amigos íntimos y a una mala noticia que sobrevuela entre ellos en ‘Amigos hasta la muerte’. Y todo, sin perder la sonrisa, algo inherente a este amable y brillante matrimonio de actores.
¿Cuál es el secreto de tu éxito, Marta?
El apostar por lo personal, tengo el ego colmado de muchas cosas y nunca me comparo con nadie, es la forma de estar contenta con lo que tienes. A veces, hay compañeros que te adelantan por la derecha, pero luego te toca a ti protagonizar otra historia, antes o después. En esta profesión, subes y bajas y hay que asumirlo y vivir con ello.
Llevas más de veinte años de carrera, ¿qué balance haces?
Lo mejor es que, desde que salí de la escuela de Cristina Rota, no he parado de trabajar, de hilar un proyecto con otro. Todo lo que se me ha ido metiendo entre ceja y ceja lo he conseguido, antes o después. Quizá me hubiera saltado algunos proyectos del principio, pero siempre me ha funcionado genial la intuición y, desde el 2006, he acertado. Ahora estoy donde quiero estar.